Una casa en el acantilado con vistas al mar Mediterráneo

También se pueden encontrar casas espectaculares en España. Como esta, cerca de Altea, en Alicante. De un blanco brillante, este edificio del estudio Fran Silvestre Arquitectos ganó el premio Red Dot: Diseño de Producto 2013, en arquitectura y diseño urbano.

Situada sobre un acantilado, esta gran casa de líneas puras parece suspendida en el aire y ofrece a sus ocupantes unas vistas impresionantes. Sus tonos blancos evocan la arquitectura tradicional de la región a pesar de su estilo claramente contemporáneo.

Con una de las hermosas playas de la Costa Blanca a sus pies, se divide en varios espacios a distintos niveles. A pesar de su ubicación en un terreno con un desnivel del 80 %, el cliente deseaba una vivienda de una sola planta. Por ello, y para evitar movimientos de tierra innecesarios que pudieran dañar el terreno, parte de la casa está parcialmente suspendida en el aire, a la altura de la entrada desde la carretera.

El garaje y la piscina se encuentran en diferentes niveles inferiores. La piscina, construida sobre una superficie plana preexistente, da la impresión de integrarse con el mar Mediterráneo y está revestida de mármol blanco. El blanco también es el color de todas las paredes exteriores, hechas de hormigón armado recubiertas con una capa de estuco blanco. Los demás materiales utilizados combinan con la pureza del blanco y el azul de la piscina, con la espléndida decoración que proporciona el paisaje.